
Encuentra paz en el abandono a Dios
Un espacio para encontrar esperanza y consuelo frente a la ansiedad y la depresión, mediante la oración de abandono a Dios Padre.
365
Entra cuando lo necesites
100
X ciento para ti
Repite
Cuanto sea necesario
Comparte
A un amigo
Día 1
¿Por qué te confundes al preocuparte? Déjame a mí el cuidado de tus negocios y todo mantendrá la calma. Te digo que todo acto de verdadera, ciega y completa rendición a mí me produce el efecto que deseas y que resuelve toda complicada situación.
O Jesús, yo me entrego a ti, ¡ocúpate de todo! (10 veces)
Día 2
Entregarse a mí no significa ni inquietarse, ni estar amargado, ni perder la esperanza, ni tampoco significa ofrecerme una oración pidiéndome que te siga y transformarte la preocupación en oración. Está en contra de esta entrega, profundamente en contra, la preocupación, el estar nervioso y pensar en las consecuencias de todo. Es como la confusión que siente un niño cuando le pide a su madre atender a sus necesidades, y luego intenta ocuparse de esas necesidades por sí mismo con el fin de que sus intentos se entrometan en el camino de su madre. Rendir significa cerrar plácidamente los ojos del alma, rechazar los pensamientos de tribulación y ponerse en mi cuidado, para que sólo yo actúe, diciendo “Ocúpate tu”.
O Jesús, yo me entrego a ti, ¡ocúpate de todo! (10 veces)
Día 3
Cuántas cosas hago cuando el alma, en tanta necesidad espiritual y material, se dirige hacia mí, me mira y me dice; “Ocúpate tú”, entonces cierra los ojos y se pone a descansar. Tú haces oración para que yo actúe a través del dolor, pero que actúe del modo que deseas tú. No te diriges a mí, sino deseas que yo adopte tus ideas. No eres como un enfermo que ruega que le cure el doctor, sino como un enfermo que le explican el doctor, cómo hacerlo. Así que no actúes de esta manera, sino ora como yo te enseñé en el Padrenuestro: “Santificado sea tu nombre”, eso es, ser glorificado en mi necesidad. “Venga nosotros tu reino”, eso es, deje todo que hay en nosotros y en el mundo estar en acuerdo con tu reino. “Hágase tu voluntad en la Tierra como en el Cielo”, eso es, en tu necesidad, decidir si uno se ve preparado para nuestra temporal y eterna vida. Si verdaderamente me dices: “Hágase tu voluntad”, que es lo mismo que decir: “Ocúpate tú”, yo intervendré con toda mi omnipotencia, y resolveré las situaciones más complicadas.
O Jesús, yo me entrego a ti, ¡ocúpate de todo! (10 veces)
Día 4
¿Ves el mal creciendo y no debilitando? No te preocupes. Cierra los ojos y dime con esperanza: “Hágase tu voluntad, ocúpate tú”. Yo te digo que yo me ocuparé, y que yo intervendré igual como lo hace un doctor, y llevaré a cabo milagros cuando hagan falta. ¿Ves que la persona enferma se pone peor? No estés tristes, sólo cierra los ojos y dime: “Ocúpate tu”. Ya te digo que yo me ocuparé, y que no hay medicina más poderosa que mi querida intervención. Por mi amor, esto te lo prometo.
O Jesús, yo me entrego a ti, ¡ocúpate de todo! (10 veces)
Día 5
Y cuando te tenga que liderar por un camino diferente al que puedes ver, yo te prepararé; te llevaré en mis brazos; dejaré que te encuentres, como cuando los niños duermen en brazos de sus madres, al otro lado del río. Lo que te preocupa y te duele inmensamente son tus razonamientos, tus pensamientos y preocupaciones, y tu deseo de afrontar todo lo que te afecta.
O Jesús, yo me entrego a ti, ¡ocúpate de todo! (10 veces)
Día 6
Estás ocioso; deseas juzgar todo, organizar todo y llevarlo todo a cabo, y te rindes a la fuerza humana, o peor aún – a los hombres, confiando en su intervención, – esto es lo que complica mis palabras y mis puntos de vista. Oh cuánto deseo de ti esta rendición, para que te pueda ayudar; ¡y cuánto sufro cuando te veo nervioso! Satán intenta hacer justamente esto: perturbar a los seres y lanzarlos dentro de la mandíbula de la iniciativa humana, así que, confía solamente en mí, descansa en mí y ríndete a mi en todo.
O Jesús, yo me entrego a ti, ¡ocúpate de todo! (10 veces)
Día 7
Yo llevo a cabo milagros en proporción a tu total rendición a mí y a tu pensar en ti mismo, yo siembro tesoros de gracias cuando estás en la pobreza más profunda. Ni una persona de razón, ningún pensador, jamás ha llevado a cabo milagros, ni siquiera entre los santos. Él realiza trabajos divinos sobre aquellos que se rinden a Dios. Así que no lo pienses más, porque tu mente es propia de tu ego y resulta muy difícil ver el mal y confiar en mí, y a la vez no pensar en ti mismo. Haz esto para satisfacer tus necesidades, haz todos esto y verás grandes milagros. Yo me ocuparé, esto te lo prometo.
O Jesús, yo me entrego a ti, ¡ocúpate de todo! (10 veces)
Día 8
Cierra los ojos y déjate llevar por la fluida corriente de mi gracia; cierra los ojos y no pienses en el presente, alejando, del futuro, los pensamientos, igual que lo haríais de la tentación.
Reposa en mí, confía en mi bondad y te prometo por mi amor que si dices “Jesús, ocúpate tu” que yo me ocuparé de todo; yo te consolaré, te liberaré y te guiaré.
O Jesús, yo me entrego a ti, ¡ocúpate de todo! (10 veces)
Día 9
Ora siempre en preparación a la rendición, y recibirás de ello paz y grandes recompensas, hasta cuando yo te otorgue la gracia de inmolación, de arrepentimiento y de amor. Entonces,
¿qué importa el sufrimiento? ¿Te resulta imposible? Cierra los ojos y dime con toda tu alma, “Jesús, ocúpate tu”. No tengas miedo, yo me ocuparé y tu bendecirás mi nombre. Mil oraciones no pueden igualar un sólo acto de rendición, recuerda bien esto. No hay novena más eficaz que esta.
O Jesús, yo me entrego a ti, ¡ocúpate de todo! (10 veces)
Madre, soy tuyo ahora y siempre. A través de ti y contigo siempre quiero pertenecer completamente a Jesús.
Gracias a este espacio, encontré fortaleza y consuelo en los momentos más oscuros.

María López
Psicóloga Clínica
Este sitio me ayudó a encontrar un refugio de paz y a reconectar con mi fe en tiempos difíciles.

Juan Martínez
Director Creativo
Encuentra paz interior con la oración de abandono
Descubre cómo este espacio puede transformar tu vida.
Reflexión Profunda
Una herramienta para conectarte con Dios y contigo mismo.
Apoyo Espiritual
Encuentra consuelo y fortaleza en momentos difíciles.
Oración Guiada
Recibe orientación para entregarte a la voluntad de Dios.
Comunidad de Fe
Únete a otros en la búsqueda de esperanza y sanación.
Oración de abandono: paz en tiempos difíciles
Explora nuestras respuestas a preguntas comunes para encontrar apoyo espiritual de manera clara y accesible.
¿Qué es la oración de abandono?
Es una práctica para confiar plenamente en Dios en momentos de incertidumbre.
¿Cómo puede ayudarme a reducir la ansiedad?
La oración fomenta la calma interior al dejar tus preocupaciones en manos de Dios.
¿Necesito experiencia previa para empezar?
No, cualquier persona puede comenzar independientemente de su experiencia previa en oración.
¿Cuánto tiempo debo dedicar a la práctica diaria?
Incluso unos minutos al día pueden marcar la diferencia en tu bienestar.

El poder de la oración en los momentos difíciles
Explora cómo nuestras prácticas pueden transformar tu vida, brindando consuelo y esperanza en cada etapa.
Encuentra paz interior
Descubre cómo la oración de abandono puede ayudarte a superar la ansiedad y encontrar serenidad.
Confianza plena
Aprende a dejar en manos de Dios tus preocupaciones, confiando en Su guía y amor incondicional.
Fortaleza espiritual
Fortalece tu espíritu a través de la fe, encontrando luz en medio de la oscuridad.
Acceso Básico
$00.00
Incluye recursos exclusivos y meditaciones guiadas para tu bienestar emocional.